1- Su historia
El 30 de Diciembre de 1696, en la ciudad de Quito, estaba enfermo y desahuciado el Obispo Don Sancho de Andrade y Figueroa y, en el pueblo de Guálupo, de gran devoción a la Virgen María, se penso trasladar en procesión, la imagen de Nuestra Señora de Guálupo a la Catedral, pidiendo por la salud del Obispo.
Se manifiesta que estando la procesión frente a la Iglesia de San Francisco y siendo las cuatro y cuarentaicinco de la tarde, se escucho la campana que daba la señal del Gloria Patri, oyendose de pronto la voz del Doctor Don José de Ulloa, Capellán de las religiosas de la Inmaculada Concepción, quien señalaba en dirección de oriente y exclamaba: ¡La Virgen!..¡La Virgen!...
Todos los asistentes (cerca de 500 personas) vieron entre los santuarios de Guálupo y de Quinche, aparecer la imagen de la Virgen, descansando sobre una nube, con una corona sobre su cabeza, portando en su mano derecha un tallo de azucena y en su brazo izquierdo al Niño Jesús. Esta aparición duró el tiempo que los fieles entonaron el Gloria Patri y el rezo de un Padre Nuestro y de un Ave María. Manifiestan que la aparición se fue desvaneciendo y la nube cubriendo la imagen.
Después de su aparición se dío la mejoría del Obispo Sancho de Andrade, quien al recuperarse autorizó el culto a la Virgen y erigió en la Catedral de Quito un altar.
2. Incorporación de la imagen a las andas del Señor de los Milagros
El lienzo de Nuestra Señora de la Nube, advocación de origen Ecuatoriana; ubicada en el reverso de las sagradas andas del Señor de los Milagros de Nazarenas, como única referencia de fecha, se tiene el 20 de Octubre de 1747, dado que en la relación de sucesos ocurridos en esa indicada fecha, dicha imagen es mencionada por el cronista Eusebio de Llano Zapata en su “Observación Diaria”. Asimismo de su “Relación de Sucesos” en uno de sus comentarios sobre la procesión del Señor de los Milagros, dice: …” salió por la mañana la imagen, visitando las calles, ramadas, Iglesias y Monasterios y duro la procesión cinco días … ese año alargo mucho su recorrido y al reverso de la imagen se veía otra de Nuestra Señora de la Nube, advocación quiteña que se había aparecido en el cielo de dicha ciudad en 1696…” ; no existiendo otra referencia, se considera la anteriormente mencionada, como el de la modificación de las Andas al quedar incorporadas ambas imágenes.
La tela en donde está pintada la efigie del Señor de los Milagros de Nazarenas, es más antigua que el de nuestra Señora de la Nube; entre ambas hay una diferencia de 60 años, tomando en referencia la primera procesión del 20 de Octubre de 1687 y la primera mención a la Virgen que se hace en 1747; lo que se ignora por falta de documentación al respecto, es el nombre de los artistas que pintaron ambos lienzos.
3. La Virgen de la Nube y su simbolismo
La imagen de la Virgen, se presenta como una reina; en su mano derecha sujeta su cetro; la azucena representa su coraza y el olivo su fruto, símbolo de su vinculación con Israel; en su brazo izquierdo carga amorosamente a su hijo, el Niño Jesús que lleva al mundo en sus manos, y la luna le sirve de pedestal, que representa el triunfo de María sobre el Islam.
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